martes, 18 de mayo de 2021

Comentarios sobre la serie "Dinastía" (2017)



En 1981 se estrenó la serie Dynasty, protagonizada por John Forsythe (Blake Carrington), Linda Evans (Krystie de Carrington) y Joan Collins (Alexis, exesposa de Blake). Sus creadores, los esposos Richard y Esther Shapiro, buscaban superar el éxito de la serie Dallas (1978), algo que durante años lo consiguieron. 

La historia gira en torno al millonario petrolero Blake Carrington, su familia y contactos cercanos, quienes refractan a una sociedad de doble moral, en la cual problemáticas sociales como la discriminación social por el color de piel, el empoderamiento de la mujer, y la pseudo aceptación hacia los homosexuales son parte la vida diaria de los personajes de esta serie.

Si Denver es la ciudad en donde ocurren la mayoría de sucesos durante la versión original de 1981, es Atlanta el nuevo escenario de este reboot que podemos ver en Netflix. 

Dynasty (Dinastía, 2017)

En esta nueva versión que podemos ver en Netflix, abundan peleas entre los miembros de una familia disfuncional adinerada, planeamientos macabros, amor, sexo, luchas por conservar el poder, manipulación a diestra y siniestra, mentiras y asesinatos. 

Josh Schwartz, Stephanie Savage y Sallie Patrick crearon esta versión de la original Dynasty (1981), agregando lo que atrae a la juventud millennial de este tiempo: drama, dinero, moda, oscuridad, pasado misterioso, sexo y poder. 

Esta nueva versión o reboot, proyectada en cuatro temporadas (la pandemia impidió que se terminara de grabar los dos últimos capítulos de la tercera temporada y el íntegro de la cuarta), aborda contextos mundiales actuales, tales como la crisis en Venezuela, y los inmigrantes ilegales en Estados Unidos de Norteamérica, por ejemplo.

Además, refleja la actual tendencia estadounidense vouyerista de morbo y fanatismo hacia algún miembro de una familia celebrity, tales como los Hogan, Osbourne, Obama o Kardashian, por solo citar algunas familias que han montado un espectáculo sobre ellas mismas, apelando al morbo social que puedan generar.  



Los personajes

Sus personajes egocéntricos, vacíos, sin carisma, sedientos por obtenerlo todo, refractan a nuestra sociedad contemporánea, más preocupada por las apariencias y tener dinero, antes que saber cómo las personas se sienten frente a ausencias familiares o falta de amor. 

A diferencia de la serie original ochentera, no oculta ni cuestiona la presencia de los homosexuales ni de los afrodescendientes. En vez de los personajes de carácter enérgico, contundentes, de la versión original, nos muestra a seres caprichosos, huérfanos de amor y de calor humano. 

Los hermanos Fallon y Adam Carrington, el mayordomo Ander y Alexis, la exesposa de Blake son los verdaderos protagonistas de la historia, debido al rol que cumplen dentro de esta. Es más, no existe ningún personaje completamente malvado o bueno, algo similar como ocurre en los anime japoneses. Esto habla bien sobre la nueva construcción sicológica de sus papeles. 

Dinastía, ¿entretiene?

Sí. Las historias vertidas en la serie entretienen, por algunos momentos divierten; por otros, nos invitan a reflexionar sobre nosotros mismos, nuestra sociedad, y cómo queremos lograr nuestros objetivos durante la existencia.

En este drama social televisivo, ver las riquezas, miserias, fortalezas y debilidades de cada integrante de la familia Carrington, nos puede interesar o no, pero de ninguna manera, nos deja indiferentes. 










No hay comentarios.:

Publicar un comentario